domingo, 20 de julio de 2008

Confesión


A mí que siempre fui floja y propensa al espamento
si la vida lisonjera me regala una ilusión;
me venís en diagonal entre el cielo y el infierno,
a fijarme la mirada y a causarme sensación.


Las medias y los breteles se me suicidan en masa
y el humo del cigarrillo tiene gusto a confesión;
tu resistencia esquinera de varón agazapado,
me tiene haciendo equilibrio entre incendio y metejón.


Mozo tráigame otra copa que se viene la tormenta,
ya pueden cerrar al día aprovechando el temblor
soñador irreverente, con vos le doy al escabio,
porque hoy sí vale la pena y hacía tanto que no…

3 comentarios:

Diego Planisich dijo...

Me gusto, un aire arrabalero, bueno, fue la sensación. Me gustó el blog, pasaré seguido supongo. Saludos.


Suspiro...

mariano scovenna dijo...

brindo con vino por esos momentos en que todo es ebullición!!!!

Diego Planisich dijo...

he caído aquí (nuevamente)mientras colgaba de tu inspiración...


Suspiro...