domingo, 2 de noviembre de 2008


Muy de usted esto de hacerse pensamiento
usted cuando las sombras,
y yo no lo voy a evitar.
Envuelta en gajos de sábanas heladas segregando pieles,
yazgo esperando que usted venga a comerme el corazón.
Usted hace con su ausencia
lo que otros hacen con la lluvia.
A su lado la luna estalla en mil pedazos.
A su lado la luna.
El tercer gallo lo anuncia
usted cuando los soles
y yo no lo voy a negar.

2 comentarios:

Juan Camilo dijo...

Diría que su corazón me sabe jugo de mora. Sin temor, sin dudas, me bebo esta ilusión. Me has salvado de la soledad. No queda más que enviarte una ansiedad que se están tragando las montañas desde Colombia hasta Argentina.

luciérnaga furiosa dijo...

4650 km